El bótox tiene muchas aplicaciones, estéticas y curativas. Por eso nos interesa conocer lo mejor posible todo lo relacionado con este método de rejuvenecimiento facial, en el que somos especialistas en Gabinete de Medicina Estética en Logroño. Te contamos lo más importante sobre este producto.
Bótox, una proteína purificada
El bótox es una sustancia de la que se habla mucho y que tiene un amplio uso en medicina estética. Pero a la vez es objeto de muchas dudas y de ideas contradictorias.
Se obtiene de la proteína toxina botulínica tipo A. Comenzó a utilizarse en los años 80 para los espasmos musculares del rostro y otras alteraciones neurológicas. Su uso como antiarrugas se descubrió de forma casual y hoy es uno de los productos más demandados y seguros como tratamiento estético, aunque también se utiliza para fines terapéuticos, como el tratamiento del ictus o la parálisis cerebral.
La aplicación consiste en infiltrar una cantidad mínima de sustancia con una aguja fina en el músculo, debajo de la piel en la zona a tratar, y, dado que inhibe el movimiento muscular, el área aparece más relajada.
¿Cuándo aplicar el bótox?
Es recomendable usarlo cuando realmente se necesita, generalmente a partir de los cuarenta años, que es cuando comienzan a aparecer las arrugas, o cuando hay un uso exacerbado de gestos, pero esto depende mucho de cada paciente.
Las zonas en las que se puede aplicar el bótox son el tercio superior del rostro, en las arrugas de la frente, entrecejo, patas de gallo y cola de la ceja.
Cuando hay una sudoración excesiva, puede utilizarse en las axilas, manos, pies o cuero cabelludo.
¿Cuándo no aplicar el bótox?
Su efecto consiste en relajar el músculo en el que actúa, pero no para rellenar el mismo. No se recomienda usarlo cuando se busca conseguir un efecto volumen o variar las formas.
La naturalidad al poder
Cuando pensamos en un procedimiento estético, pensamos en hacernos algo que resulte natural, que no se note demasiado. Intentamos conseguir un cutis radiante, pero no aparentar ser veinte años más joven, lo cual evidentemente no resulta natural.
El bótox tiene la ventaja de que, si se aplica con medida, tiene unos resultados muy naturales. Si nos excedemos, el resultado es un rostro inexpresivo, al que le cuesta, incluso, esbozar una sonrisa.
Tratamiento y su duración
La duración normal se extiende desde los 3 meses a los 6 meses y lo ideal es repetir el tratamiento cada 4 o 5 meses, antes de que su efecto se elimine por completo.
A la hora de aplicarte bótox, sé muy cuidadosa/o y confía sólo en un profesional acreditado; esto es, que tenga título médico, que te deje claro el producto que va a inyectar ya que solo hay 3 marcas legales en el continente europeo: Vistabel®, Azzalure® y Bocouture®, (seme), que informe del número de lote del producto y que se trate de un centro médico autorizado con depósito de farmacia.
También es preciso que se use un vial por paciente ya que el precio por vial está regulado por la Agencia Española del Medicamento.
Pros y contras
Su primordial ventaja es que logra resultados de forma rápida y cómoda sin tener que visitar el quirófano.
Y su desventaja que hay que repetir el tratamiento al cabo de unos meses debido a que su efecto tiene una duración determinada.
Tratamiento con bótox en Logroño
En Logroño, en Gabinete de Medicina Estética empleamos las técnicas más innovadoras y avanzadas para rejuvenecer el rostro. Una de ellas es el tratamiento con bótox para corregir las arrugas de expresión.
Realizamos la inyección de toxina botulínica de una forma selectiva, produciendo la relajación de la expresión del rostro. Si se aplica correctamente, el rostro no pierde expresividad.
El efecto del bótox se observa a los tres días aproximadamente de haber sido introducido en la piel y su duración varía entre los tres y los seis meses, por lo que es preciso someterse al tratamiento dos o tres veces al año para mantener los efectos de este tratamiento.
Contacta aquí con nosotras y te asesoraremos sin compromiso.