La frente es una de las zonas más destacadas y visibles de nuestra cara, un elemento esencial y definitorio de nuestro rostro. La frente nos da personalidad, pero, como consecuencia de los gestos que realizamos inconscientemente al hablar, reír o fruncir el ceño (por ejemplo), aparecen pequeñas y finas líneas de expresión.
Estos pequeños surcos pueden empezar a apreciarse a edades tempranas, aunque lo normal es que comiencen a ser más visibles a partir de los 35 años.
Esta es una de las zonas más propensas a la aparición temprana de las líneas de expresión, éste tipo de arrugas son normales e inevitables, pero se puede atenuar su apariencia, prevenir nuevas arrugas y lucir un aspecto más joven con un tratamiento fiable, seguro y eficaz: la toxina botulínica en la frente. Si realizas el tratamiento en un centro con profesionales cualificados y amplia experiencia, como es nuestro caso, el resultado solo puede ser positivo. Mantendrás tu expresión de siempre eliminando esas pequeñas arruguitas.
Despídete de las arrugas sin perder expresividad
Cuando lo que queremos es eliminar y prevenir arrugas la microinyección de toxina botulínica es un gran aliado.
La piel de la frente es una zona que merece un especial cuidado: si llevamos flequillo suele estar en contacto constante con nuestro cabello, si lucimos un estilo despejado es la zona que está más expuesta a la luz solar. Por ello es importante una correcta hidratación y protección contra los rayos UVA.
La Toxina botulínica es el tratamiento más indicado para corregir las arrugas de la región frontal. Se aplica superficialmente y en cantidades muy pequeñas produciendo la relajación en los músculos y bloqueando los impulsos nerviosos que desencadenan en contracciones musculares. Como resultado se impide la aparición de nuevas arrugas, y aplicado en una cantidad adecuada se consigue un aspecto natural y el rostro no pierde expresividad.
La importancia de elegir un centro profesional
Como siempre os recomendamos para este o cualquier otro tratamiento de medicina estética, acudid a un centro médico especializado en este tipo de disciplina con personal médico cualificado que os realice el tratamiento.
Para que no te den “gato por liebre” debes saber que sólo hay 3 marcas legales en el Euroapa que comercialicen este producto (Vistabel®, Azzalure® y Bocouture®) además, sólo los centros médicos con depósito de farmacia están autorizados para realizar estos tratamientos.
¿Cuántas sesiones de toxina botulínica en la frente son necesarias?
El procedimiento de una sesión es rápido y sencillo, suele realizarse en una sesión que dura 15 minutos aproximadamente. Se procede a inyectar la toxina botulínica de manera selectiva produciendo la relajación del músculo. Suele bastar con una sesión, pero se realiza el seguimiento del paciente en caso de que necesite algún retoque más.
Los resultados se aprecian al cabo de unos días, alcanzando su mayor efectividad a partir del día 15. El efecto puede mantenerse hasta 6 meses después del tratamiento, momento en el que se recomienda volver a inyectar el producto.
Para lograr una piel sin arrugas todo el año lo ideal sería realizar las sesiones de 2 a 3 veces al año, según la piel de cada paciente.
Además de su uso estético la toxina botulínica es una preciada sustancia que también tiene otros usos terapéuticos y puede ayudar a mitigar dolores musculares, migrañas, tics involuntarios, exceso de sudoración, etc.
Es importante no confundir los efectos de la toxina con los del ácido hialurónico: ambos tratamientos tienen efectos rejuvenecedores, pero son dos sustancias totalmente diferentes.
Mientras que la toxina botulínica se usa para corregir arrugas el ácido hialurónico sirve para remodelar y dar volumen a diferentes zonas (labios, pómulos, etc.).
Lo mejor en caso de duda es acudir a un centro profesional y especializado, como nuestro Gabinete de Medicina Estética donde nuestro equipo médico estético te asesorará en que tratamiento es el más adecuado para ti.
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