A pesar de que pueden afectar indistintamente a los dos sexos, las estrías son una preocupación importante para muchas mujeres. Aunque su aparición no supone un peligro como tal, para muchas personas sí que representan un dolor de cabeza desde el punto de vista estético. Técnicamente, las estrías aparecen cuando se produce una rotura de las fibras de elastina y colágeno que conforman la piel. ¿Por qué ocurre? Las razones son muy diversas: hidratación escasa, por un embarazo o incluso por culpa de la pubertad. Son situaciones que la piel de una persona no está preparada para afrontar. Aunque la buena noticia es que se pueden prevenir teniendo en cuenta algunos aspectos concretos.
¿Qué tipos de estrías se pueden encontrar?
La tipología de las estrías viene definida fundamentalmente por la fase en la que se encuentra:
- Las denominadas estrías rojas aparecen justo cuando se produce esa rotura de la que hemos hablado al principio del artículo. Es similar a lo que sucede con cualquier proceso inflamatorio.
- Con el paso del tiempo la inflamación de la piel se reduce, baja de intensidad y, por decirlo de alguna manera, esas fibras que se han roto se vuelven blancas. El aspecto es muy similar al de una cicatriz. Medicamente se dice que las estrías blancas corresponden al estado final del proceso, puesto que en esa zona concreta deja de existir circulación de la sangre.
¿Se pueden evitar?
Sí, es posible evitar la aparición de las estrías. Al ser un proceso muy vinculado con situaciones como el exceso de peso, la rutina o momentos tan concretos como un embarazo, se pueden tener en cuenta ciertos aspectos que ayudan a combatirlas. Un ejemplo perfecto y sencillo de cumplir es la hidratación de la piel con cremas específicas antiestrías combinadas con masajes adecuados y prolongados que ayuden a la absorción.
No obstante, las cremas no son un producto milagroso. También es importante tener controlados los cambios brucos de peso (con especial cuidado a las dietas que hacen bajar muchos kilos de golpe), beber mucha agua y realizar ejercicio físico regular. Todo esto es fundamental para ayudar, precisamente, a la circulación de la sangre.
Una vez que aparecen, ¿cómo puedo eliminar las estrías?
Lo más importante es tener en cuenta que las estrías son una lesión de la piel. Es decir, a la hora de iniciar un tratamiento estético que ayude a disimularlas y eliminarlas se debe completar en primer lugar una valoración de cada caso, de la que se ocuparan nuestras profesionales.
Si la prevención y los tratamientos primarios no han sido efectivos, se puede recurrir a técnicas concretas y bastante efectivas como la radiofrecuencia, la carboxiterapia o el peeling. Los tres comparten un aspecto en común: aumenta la circulación o la microcirculación de la zona tratada. ¿Quieres conocer más detalles sobre ellos?
- La carboxiterapia son unas microinyecciones de dióxido de carbono (CO2). Utilizamos unas agujas muy finas para inyectarlo a nivel percutáneo, subcutáneo o intradérmico en función del tratamiento que estemos realizando. Además de mejorar la microcirculación, mejora la elasticidad de la piel, que es precisamente el factor de riesgo más importante para la aparición de las estrías.
- Por su parte, la radiofrecuencia consiste en un calentamiento controlado a nivel de dermis superficial y profunda. Uno de sus efectos más relevantes es que sirve para producir nuevo colágeno, permitiendo que todo el tejido adquiera más firmeza.
- Otro posible tratamiento es un peeling, que en dermocosmética se utiliza para producir una renovación celular acelerada de las capas de la piel. Además de ayudar con las estrías, también contribuye a mantener una piel joven y radiante en otras zonas como la cara.
¿Te preocupan las estrías y quieres acabar con ellas?
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